10 de abril de 2012

Desempleo, una oportunidad

Cuando pierdes el trabajo tu actitud, entusiasmo, motivación, autoestima, tu carácter y sobre todo el estrés entran en crisis y desesperación.

Después del susto inicial de encontrarte sin empleo, tu instinto es buscar otro trabajo cuanto antes. Sin embargo, reflexiona antes de realizar una búsqueda pobre, desorientada, poco productiva y desorganizada.
Te encuentras en una situación nueva. La vida que hasta ese momento has realizado, cambia. Lo que pase a partir de ese momento es bastante incontrolable e impredecible. Este acontecimiento vital provoca estrés y ansiedad a quien lo padece, pudiendo incluso caer en depresión.
Para empezar, realiza una lista de funciones y destrezas que posees. Otra, con las empresas donde quieras trabajar. Por último, las habilidades, conocimientos y aprendizajes que debes conseguir.
Una vez escritas, tendrás las ideas más claras para ir a tu oficina de empleo, agencia de trabajo temporal o portal de Internet y entrar en un programa de búsqueda activa de empleo.